En VIVIM creen en una arquitectura reflexionada, coherente y atenta al detalle. Una búsqueda constante de aquello que hace revalorizar los espacios en los que interviene este equipo multidisciplinar liderado por los arquitectos Paul Vilar, Josep Vilardaga y Sergi Madrid. En estos casi diez años de actividad han desarrollado principalmente proyectos residenciales y de oficinas así como múltiples espacios de coworking para Monday.

«La oficina de hoy tiende a querer ser algo más que un simple lugar de trabajo»

 

¿Qué os llamó la atención de la arquitectura para hacer de ella vuestra profesión?
Pau: De pequeño quería ser director de cine, lo decía mucho pero nunca me lo creí. En realidad me gustaban un montón de cosas, supongo que el factor común en la mayoría de ellas era la creatividad. En el momento de decidir un camino tuve la intuición que la arquitectura (y el universo que la rodea) permitía aprender y desarrollar un abanico muy amplio de posibilidades creativas. Y creo que acerté.
Josep: Nací en una familia de tradición arquitectónica. Recuerdo de pequeño las visitas al despacho de mi padre donde trazaba mis primeras líneas a “Rotring” jugando con el “paralex”, escuadra y cartabón en la clásica mesa ligeramente inclinada de color verde. En aquel entonces evidentemente no era consciente de lo que suponían estas horas de juego, pero poco a poco el interés por la arquitectura fue calando en mi interior. Supongo que en mi caso que acabara siendo arquitecto, muy a pesar de las recomendaciones familiares, fue algo inevitable.
Sergi: Crecí jugando horas y horas con el LEGO. Supongo que desarrollé ciertas habilidades en relación a la comprensión del espacio y también se me daban bien las artes plásticas. La influencia de mi padre que trabajaba en el sector supongo que también fue determinante.

¿Cómo os encontráis e iniciáis este estudio en común?
Nos conocimos en la universidad. Arquitectura es una carrera apasionante pero muy dura: muchas entregas, muchas noches sin dormir y mucho trabajo en equipo. Nos ayudamos y compartimos mucho allí, nos curtimos juntos…
Justo al terminar la carrera surgió la oportunidad de realizar un proyecto de una vivienda unifamiliar y dos de nosotros nos juntamos para compartir este encargo junto a otros trabajos relacionados con la visualización arquitectónica. Un par de años después hubo el inicio “oficial” donde ya nos juntamos los tres en un estudio en Vallvidrera.

Pronto celebraréis la primera década de actividad. ¿Qué balance hacéis de estos años?
Es un orgullo inmenso mirar atrás y ver todo el trabajo realizado. El hecho de haber construido algo de cero, un estudio en plena crisis, conseguir crecer y consolidarlo. Poder tener la oportunidad de colaborar en proyectos cada vez de mayor envergadura junto a todas las personas que nos acompañan. Nos damos cuenta de la dedicación y el esfuerzo invertidos y también de la decisión acertada de diversificar nuestro trabajo entre arquitectura, interiorismo e imagen virtual, que nos ha permitido surfear en momentos difíciles. De hecho, de nuestros inicios (de una casa y unos renders) surge la evolución de lo que somos hoy día y nuestras dos marcas: VI VI M para los proyectos de arquitectura e interiorismo y VEO (Visual Experience Office) que nace como una agencia de visualización. Nos ha apasionado no solo ejercer como arquitectos sino también colaborar con otros estudios o empresas del del sector de la arquitectura, el diseño y el márquetin. Y tantas personas que hemos conocido…

Desarrolláis principalmente proyectos de oficinas y de viviendas poniendo énfasis en diseñar arquitectura pensada para vivirla. ¿Qué valores arquitectónicos encontramos?
Tenemos tres puntos de vista particulares, pero coincidimos siempre en tratar de encontrar el valor escondido de cada proyecto que ayude a potenciar una mejor experiencia a las personas que los habitan. A veces el valor está en entender el lugar, en las relaciones entre espacios, en un rincón, en un detalle…a veces el mejor valor es simplemente encontrar un relato que te permita construir
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Imagin Café en Barcelona Foto: Joan Guillamat

¿Qué sensaciones buscáis que los usuarios experimenten al pisar vuestros proyectos?
En el momento inicial del proceso creativo nos gusta siempre sorprender, conseguir el efecto ‘wow’, incorporar soluciones que superen las expectativas del cliente, algo que vaya más allá de cumplir con sus necesidades. Tenemos comprobado que hacer partícipe al cliente durante todo el proceso ayuda a que posteriormente, al ser consciente de todo el trabajo que hay detrás, le permita si cabe disfrutar aún más.
Por el contrario, para los usuarios que experimentan el proyecto una vez terminado, sin haber tenido ninguna relación en el proceso creativo, nos conmueve la idea de que se sientan a gusto sin terminar de saber por qué.

En el ámbito residencial, ¿qué nuevas demandas estáis notando que los clientes piden hoy en día?
Detectamos un cambio de conciencia en intentar adoptar sistemas constructivos más industrializados y que respondan a criterios más sostenibles. En nuestras manos está educar y asesorar al cliente para que invierta buena parte de sus recursos en este sentido. Creemos que el mensaje a calado de manera global, aún a expensas de saber que en ocasiones son decisiones que afectan al bolsillo.

En el sector de oficinas, encontramos proyectos para Caixabank, eDreams o Boehringer Ingelheim, entre otros. ¿Qué innovaciones os piden compañías líderes a la hora de desarrollar sus oficinas?
La oficina de hoy tiende a querer ser algo más que un simple lugar de trabajo. Desde hace algunos años hay una creciente necesidad de crear espacios flexibles, capaces de absorber diferentes formas de trabajar y de relacionarse. A veces también pensamos que se quieren adoptar tendencias de manera innecesaria. Está claro que el Covid ha acelerado e influido mucho en el sector del workplace y ha puesto el foco aún más en la importancia del bienestar de las personas por encima de otros factores. Nos encontramos con empresas que quieren innovar para adaptarse a los nuevos tiempos pero que también hacen esfuerzos importantes para atraer de nuevo al empleado a la oficina ofreciendo espacios más confortables, atractivos y de mayor calidad.

Para Monday, uno de los principales operadores de Coworking, habéis desarrollado una trayectoria de colaboración en múltiples proyectos. ¿Qué soluciones desde el diseño aportáis para el óptimo rendimiento de un espacio de coworking?
La suerte de poder acompañar a Monday des de sus inicios nos ha permitido conocer de primera mano cómo ha ido evolucionando las necesidades del mercado. Los espacios de coworking se basan en conseguir la máxima rentabilidad ya que funcionan con ratios de persona/m2 muy estudiados. Son espacios complejos que ofrecen un amplio abanico de servicios para ayudar a generar sinergias y el sentido de pertenencia a una comunidad. Nuestro mayor reto es mezclar bien los ingredientes del cocktail para conseguir el equilibrio perfecto entre rentabilidad y confort del usuario. Añadiendo un toque de diseño y soluciones atractivas a un bajo coste y timmings muy ajustados… ¡todo un reto!

¿Existen diferencias a la hora de abordar un proyecto corporate que uno de coworking?
Aunque los proyectos corporate tienen muy definidas sus necesidades, sus equipos y su funcionamiento interno, la incertidumbre actual provoca que adopten sistemas similares a los proyectos de coworking. Sobre todo, en la creación de espacios atractivos, flexibles y que mejoren la experiencia diaria del usuario.

Vuestros trabajos son excelentes ejemplos de cómo revalorizar los espacios. ¿Las normativas están preparadas para estos nuevos proyectos más híbridos y flexibles?
Vamos a intentar ser positivos y pensar que las normativas en algunos casos nos ayudan a exprimir al máximo nuestras capacidades creativas.

¿En qué estáis trabajando?
A principios de año inauguramos las nuevas sedes centrales de Seidor en Barcelona y Vic así como también dos nuevos centros Monday en Barcelona. Actualmente seguimos trabajando en nuevos proyectos para Seidor y en la próxima apertura de Monday en Andorra. Estamos también iniciando un proyecto muy interesante para Fundació “la Caixa” y algunos proyectos de vivienda de obra nueva y rehabilitación.

Monday Pau Claris. Foto: Joan Guillamat

Nueva sede central de Seidor en Barcelona. Foto: Joan Guillamat

Twin Houses – Viviendas entre medianeras. Foto: Joan Guillamat