A partir del branding y desarrollo de marca visual, conceptualizado por el estudio Brandsummit, la agencia Huuun firma este nuevo proyecto de interiorismo comercial.
Un nuevo espacio con identidad propia y atractivo para los amantes del helado, junto a la Catedral de la Virgen en Valencia, que no deja indiferente a ninguno de sus visitantes, una marca que busca moverse al ritmo del consumidor, con un poder visual realzado por su gráfica aplicada tanto en el packaging como en diseño de su interior.
Esta nueva marca, Pops ’n Bops, nace de la pasión de sus creadores por la cultura del helado, ofreciendo su especialidad personalizada en formas de Pop (polos con base de helado de crema) y Bop (una reversión de la clásica tarrina) ambos productos artesanales. A todo ello, se le suma una experiencia de compra diferente: con un foco en los detalles y las sorpresas, buscando siempre una atención óptima que permita la personalización de sus productos por temporadas, eventos u ocasiones, pero sin sacrificar la practicidad de sus ambientes ni de la experiencia de compra o consumo. Una nueva forma de comer helado.
El negro como color neutro, como punto de partida y su contraste con tonos pastel (rosas, amarillos y naranjas) además de una influencia “ochentera” con reminiscencias al Estilo Memphis italoamericano, Huuun y Brandsummit han conseguido transmitir toda la esencia de la marca en cada uno de los elementos y rincones del espacio comercial.
El diseño innovador de Pops ’n Bops no pasa inadvertido incluso desde su exterior. Los huecos de fachada, revestidos con aluminio negro y enmarcado cada uno de ellos con LED RGB, permiten jugar con el color en función de la ocasión, así como generar cierta expectación respecto al espacio al que estamos accediendo.
Nada mas entrar al local nos da la bienvenida un característico banco corrido muy colorido hecho de una pieza de tubo de hierro fundido. En esta parte nos encontramos en la zona dinámica de la heladería donde se pueden consumir los productos de Pops ’n Bops de una forma mucho más informal, bien en el banco o bien en el rincón de pufs en tonos corporativos y mesas bajas ubicadas justo en frente, lado derecho de la entrada.
Llama la atención también todos los elementos instalados en el techo como el conducto de aire acondicionado lacado en rosa y el conjunto estructural formado por tubos negros que recorre dicho paramento vertical. Esta estructura tubular, además de albergar la iluminación técnica de la casa Nexia, nos conduce, como si de un pentagrama se tratara, hasta la gramola digital de Paviado y funciona como elemento divisorio entre las zonas del local.
Hacia el interior del espacio se ha creado un rincón íntimo y especial donde con una música de fondo a un nivel adecuado la marca pretende fomentar un ambiente ideal para disfrutar cómodamente un helado, un café o degustar algún otro de los productos que ofrece la carta de este establecimiento. Aquí los clientes se acomodan en sillas más confortables alrededor de mesas en acabados y tejidos negros y grises. Esta zona dispone de una iluminación más decorativa, en formas cilíndricas de distintos diámetros, piezas especiales en acabos blanco y negro de la firma Faro Iluminación.
El núcleo central de la heladería corresponde a la barra, con el tono negro como fondo se pretende dar protagonismo al producto y al color de los elementos de marca. No obstante, destaca su textura, construida en chapa perforada (la cual ayuda a la ventilación de la maquinaria) y con una trasera en espejo que conforma la cara frontal de la misma. Dicha barra está dotada de luz retroiluminada sobre el zócalo dándole un aspecto de flotabilidad. Siguiendo ese tono y brillo, se ha alicatado en espiga con cerámica de Porcelanosa toda la pared de la trasbarra.
Todo ello, sobre un pavimento cerámico efecto cemento de la marca Venís, cuyo tono neutro complementa, sin restar protagonismo, al resto de diseños.
Como elementos decorativos encontramos flexineones y displays retroiluminados distribuidos por diversas paredes de la heladería que nos sirven para reforzar la identidad de marca y crear rincones muy fotografiables. Son todos los elementos gráficos de la marca que adquieren un nivel icónico y que serán reconocibles en otros soportes de marca como web o redes sociales y en sus futuros locales.
Disponen también de unas originales papeleras, con ese guiño tan pop, mimetizando a los altavoces retro que junto con la gramola digital dan cuenta de la importancia de la música como elemento dinámico y experiencial de la marca. Una música que los clientes pueden personalizar eligiendo y creando una lista con sus canciones favoritas.
La comunicación de producto y la didáctica del proceso de compra está implementada sobre soportes audiovisuales que permiten transmitir toda la información hacia el cliente actualizándose el contenido de una manera más ágil y dinámica.
“Un lugar instagrameable donde la gente puede escapar de la rutina diaria y disfrutar del momento”.
