Este proyecto de reforma integral, realizado por Sincro en una vivienda de 150m2 en la calle Balmes de Barcelona, ha apostado por cambiar la distribución para conseguir una vivienda más diáfana, la recuperación de algunos de los elementos originales, y la mezcla del estilo industrial, bohemio y vintage.
La reforma de este piso, típico del Ensanche barcelonés y construido a principios del s.XX, requería una redistribución total de las estancias y se inició sin tener grandes premisas por parte del cliente. Pero sí era importante poder tener un baño en suite con todo lujo de detalles para el relax con ducha y bañera exenta (destinado principalmente a la propietaria); y otro baño diferente para el propietario de estilo más masculino e industrial.
Otro de los condicionantes era conseguir un estudio para poder trabajar en casa pero que a la vez fuese un espacio agradable y con mucha personalidad para pasar ratos escuchando música, leyendo, etc.
También era indispensable la recuperación, dentro de lo que fuera posible, de los elementos originales de la vivienda, como los techos restaurados con vigas metálicas y bóveda catalana que dotan de una gran originalidad a las estancias destinadas.
Y quizá no un indispensable, pero sí un reto, era intentar ocultar visualmente lo máximo posible los televisores. En el caso del salón se ha conseguido por su estética cuadro (Samsung The Frame) y en suite se ha ocultado en un mueble fabricado a medida con un sistema de herraje elevable.
CARACTERÍSTICAS DEL DISEÑO
Ha sido un proyecto integral de reforma, mobiliario y decoración con un estilo decorativo y unos acabados muy diferentes. En un inicio los propietarios buscaban un tipo de decoración ecléctica, con toques industriales y bohemios, y gracias a la colaboración total con los clientes conseguimos darle forma a todas sus ideas. En todo momento se dejaron asesorar para ordenar todos los conceptos, y nos lo pusieron muy fácil para la elección de los materiales, colores, mobiliario, etc.
El estilo decorativo más presente en el proyecto es el industrial, que se caracteriza por espacios abiertos y amplios con un estilo desenfadado y grandes contrastes, moderno y agresivo a la vez. La utilización de materiales como el ladrillo visto original, que hemos recuperado en muchas de las paredes; cemento, material que hemos imitado con la cerámica de Mirage de gran formato para casi todo el pavimento; hierro, visible en muchísimos elementos, pero destacar su presencia en la estructura (con vigas y pilares al descubierto) instalada en la apertura del muro de carga para poder abrir la cocina al salón; y madera, elemento con un papel muy destacado en el mobiliario, pero sobretodo, muy importante en el trabajo de recuperación de la tablilla de madera original presente en el pavimento del dormitorio suite y del despacho.
Los cerramientos nuevos de aluminio son de la marca K-Line y casan a la perfección con el estilo gracias a su acabado negro mate texturizado. El resto de ventanas son originales recuperadas. Se les han cambiado los vidrios, se han decapado y barnizado en mate, y los herrajes se han pintado a pistola dando el efecto buscado.
El conjunto de estos elementos principales es lo que coloca este proyecto en este estilo decorativo principalmente industrial, aunque pensamos que hay algún toque también de otros estilos, como el estilo bohemio, por ejemplo en el rincón hamaca y dormitorio para invitados, donde se recurre a una amplia gama de colores y estampados con algún que otro elemento étnico o tribal.
Incluso el estilo Wabi-Sabi tiene cabida en esta descripción ya que se caracteriza por ser una mezcla de vintage con rústico y bohemio, y donde se aprovecha lo antiguo para crear algo nuevo. La mesa de centro del estudio es originalmente un tablero de un juego birmano, a la que hemos añadido una estructura en horquilla en hierro (igual que la de la mesa del estudio). La consola del dormitorio suite se ha fabricado uniendo con un sobre de vidrio dos radiadores originales de la vivienda, lacándolos en rojo y consiguiendo así ese rincón único y personal.
Las puertas también juegan un gran papel en esta reforma, saliendo de lo habitual se han lacado en color gris antracita y las hay de diversos tipos. Hay puertas correderas con estructura oculta, correderas con estructuras industriales vistas, puertas pivotantes… Pero las más destacables son las correderas que dan al pasillo revestidas con un diseño fotográfico en vinilo, saliendo así de lo monótono habitual de estas estancias de paso.
Incluso el recibidor está dotado de una gran personalidad, con un gran armario para almacenaje, revestido en vinilo Vescom imitando cuero dorado, que combina muy bien con la cajonera y el espejo de los clientes, y con las piezas decorativas que alberga la estancia.
