La propuesta para el nuevo edificio de la Universidad Torcuato Di Tella se presenta como una organización rigurosamente abierta que integra la diversidad del campus en un único sistema espacial y estructural. Este proyecto del arquitecto Josep Ferrando ha ganado el Premio FAD Internacional y el de la Opinión 2020.

El predio contiene particulares ritmos y secuencias: por un lado, el gran volumen sobre la Avenida Figueroa Alcorta con su grilla de imponentes columnas y capiteles; por otro, los galpones con su serie de pórticos y ménsulas. La propuesta conjuga ambos órdenes proponiendo una modularidad integrada en el claustro de su emplazamiento.

La tectónica se convierte en la matriz de base para la expresividad austera pero multifacética del edificio. En sentido ascendente, presenta una organización tripartita, en la que cada parte suma una planta a la anterior, al tiempo que el número de apoyos estructurales se triplica y se duplica, sucesivamente, en respuesta a las necesidades espaciales de los usos requeridos en cada nivel, y otorgando una creciente esbeltez al conjunto.

El edificio se aligera a medida que se aproxima al suelo potenciando la transparencia en el sentido transversal entre el patio y la calle, y se solidifica a medida que va despegándose en correspondencia con la organización longitudinal de los interiores.

En favor de un doble propósito de especificidad y versatilidad espacial, la estructura acompaña las tendencias del programa sin volverse prescriptivamente funcionalista, y, junto a las instalaciones, ocupa el perímetro del edificio liberando la planta, pero modulándola e influyendo sobre su escala de repetición.

Se establece una relación complementaria entre ellas: mientras que la estructura va perdiendo dimensión por la reducción de cargas  soportadas al ascender, las instalaciones pierden dimensión por la reducción de sus conductos a medida que se desciende. La envolvente presenta, de este modo, un espesor que otorga a la vez racionalidad general y apertura en el tiempo.

La tensa serenidad organizativa que resulta de embeber y hacer corresponder ritmos disímiles, desde la totalidad del campus hasta la definición de los interiores, caracteriza al tiempo que confiere al nuevo edificio de capacidad integradora del campus del que forma parte.

CRÉDITOS
2016-2019 Buenos Aires
Superficie: 15.000 m2
Cliente: Universidad Torcuato Di Tella
Arquitecto: Josep Ferrando
Arquitecto Asociado: David Recio
Arquitecto Colaborador: Juan Marcos Feijoó
Equipo: Pep Batlle, Ilaria Caprioli, Joan Casas, Judit Coma, Bia Coimbra, Victoria Della Chiesa, Roger Escorihuela, Lucía Iglesias, Stefan Kasmanhuber, Taegweon Kim, Malina Lambrache, Victoria Nicolich, Macarena Parnakian, Goun Park, Daniele Russo, Máximo Sánchez, Arnau Sumalla, Adina Verenciuc, Melanie Welzel, Federico De Zatarain
Asesores proyecto: Miquel Rodríguez XMADE (envolvente), Roberto Alfie (estructuras), Nicole Michel Estudio GF SA (sostenibilidad), Andrés Rodríguez (termomecánica), Edgardo Sequeyra (electricidad), Ramon Subirà (paisajismo), Delia Dubra (iluminación), Martín Felgueras (incendios), Jorge Labonia (sanitaria y gas), WSDG (acústica), Claudio Sesín (normativa), Hernán Langé
(voz y datos), Hernán Tucci DAKNO (fachada)
Fotos: Federico Cairoli