Plastic Box es un espacio comercial que transforma la experiencia de compra mediante una arquitectura audaz y funcional. Concebido por Minimal Studio como un contenedor de hormigón de líneas puras, destaca por su techo modular compuesto por más de mil cajas plásticas recicladas, que filtran la luz y albergan sistemas técnicos ocultos. Este gesto arquitectónico, junto con un interior sobrio de materiales reutilizados, revela una mirada crítica y sofisticada sobre el consumo, donde la estética y la sostenibilidad se entrelazan en cada detalle.
Plastic Box se inspira en las obras maestras del brutalismo minimalista para reinventar un espacio comercial urbano. Este proyecto transforma una tipología cotidiana —el supermercado— en una experiencia estética audaz con una funcionalidad innovadora.
Concebido como una envolvente de hormigón crudo, el espacio se define por líneas rectas y volúmenes geométricos que evocan solidez y permanencia. Las fachadas, despojadas de ornamentación, presentan entradas diseñadas como portales oscuros que intensifican el contraste con la luz interior, generando una transición sensorial deliberada.
El elemento más distintivo es el techo: una superficie modular compuesta por más de mil cajas recicladas de plástico y alineadas con precisión milimétrica. Cada una de estas cajas, filtra la luz proyectando sombras geométricas que varían con el paso del día. Se trata no solamente de un gesto arquitectónico simbólico: las cajas también cumplen una función alojando la iluminación LED, los sistemas de ventilación y los dispositivos de recolección de agua pluvial.
El lenguaje brutalista se prolonga con un enfoque radicalmente minimalista en todo el interior. Estanterías de acero, suelos de hormigón pulido y cajas registradoras diseñadas como monolitos escultóricos refuerzan esta estética. El resultado es una atmósfera sobria, donde la iluminación indirecta ensalza los productos mediante el contraste con sus propias sombras.
Plastic Box desafía las convenciones del retail mediante una arquitectura que recicla no solo materiales, sino también usos y significados. Desde las cajas del techo hasta los mostradores, los elementos han sido rescatados de contextos industriales y resignificados, subvirtiendo su estética y funcionalidad original.
Estudio: Minimal Studio Autor: Juan David Martínez Jofre Situación del proyecto: Puerto de Pollensa, Mallorca País: España Año del proyecto: 2024 Año de terminación: 2024 Metros útiles: 193 m² Cliente: Voramar Store www.thestoresupermarkets.com Créditos fotográficos: Leonardo Cóndor www.leonardocondor.com





