En este edificio diseñado en 1925 por el arquitecto Javier Goerlich en la calle Grabador Esteve de Valencia encontramos el proyecto de remodelación integral de vivienda realizado por Murad García Estudio. La nueva distribución, y los nuevos elementos, se insertan siguiendo diseños actuales, resultando una combinación enriquecedora entre los valores intrínsecos de la construcción de la época con nuevos materiales y formas tan nobles como los existentes.

Esta vivienda, reformada en su totalidad por Murad García Estudio, se sitúa en un edificio muy especial de la calle Grabador Esteve, en pleno corazón del Ensanche de Valencia. Fue diseñado y erigido en 1925 por el genial arquitecto Javier Goerlich, uno de sus primeros proyectos, en estilo modernista, encargado por su familia y donde él mismo vivió durante muchos años. Sirva como pequeño homenaje a la figura de tan sublime arquitecto llamar a esta remodelación integral de vivienda, la CASA GOERLICH, coincidiendo además con el 50 aniversario de su fallecimiento, conmemorado este año.

El proyecto es muy sincero. Se muestra la construcción de la época, eliminando los antiguos revestimientos de yeso y cañizo de paredes y techos para dejar a la vista paramentos y pilares de ladrillo cara vista, las vigas y viguetas de madera y los revoltones del techo. Se han restaurado las emotivas tallas originales en los techos donde existían, en un estado magnífico de conservación.

Al mismo tiempo, la nueva distribución, y los nuevos elementos, se insertan siguiendo diseños actuales, resultando una combinación enriquecedora entre los valores intrínsecos de la construcción de la época con nuevos materiales y formas tan nobles como los existentes.

El espacio desde la entrada hasta la fachada se proyecta como una única zona que recoge todos los usos comunes, es decir, el vestíbulo, el estar, el comedor y la cocina, en un espacio diáfano y generoso que permite albergar incluso una amplia isla central. Las vistas a la calle ofrecen diversas miradas a edificios de la misma época, principios del siglo XX, en un magnífico contexto histórico y urbano del lugar.

La luz natural es generosa, gracias al espectacular patio de luces interior, que se convierte en el protagonista de este ámbito al haberlo acristalado. Asimismo, es la pieza que articula el recorrido hacia las habitaciones, el aseo y los baños. Los revestimientos son sobrios, sencillos, elegantes. La madera lacada de color gris oscuro sirve de hilo conductor a lo largo de toda la vivienda, presente en los frentes de armarios, incluido las armariadas de la cocina, así como en los panelados de las paredes. Las hornacinas en madera natural resaltan la calidad ambiental, estando retroiluminados con LED para dotar de luz indirecta a las estancias.

El conjunto final resulta una pieza conjunta donde se resuelve al mismo tiempo arquitectura e interiorismo, ensalzando los valores de cada disciplina en un espacio único y especial seguro para sus moradores, que como es nuestro deseo, disfrutarán de los espacios mostrados en estas imágenes, el principal objetivo del proyecto.