Ante las múltiples opciones posibles para la implantación de la edificación en la parcela, la propuesta de Unia Arquitectos pretende establecer un acuerdo entre las características del solar, la condición urbana del complejo edificatorio, el aprovechamiento óptimo de la edificabilidad, y la calidad espacial y arquitectónica de las viviendas y de las áreas de esparcimiento.
La solución adoptada consiste de dos bloques independientes enfrentados con dos núcleos de escalera cada uno que dan acceso a 3 y 4 viviendas por planta respectivamente.
En torno al núcleo vertical constituido por escalera, ascensor y huecos de instalaciones, se organizan tres tipos de viviendas diferentes en el caso de los portales intermedios, y cuatro tipos en el caso de los portales extremos. Se consigue así una distribución variada de tipologías, no solo teniendo en cuenta el número de habitaciones, sino también parámetros adicionales como orientaciones y relaciones entre las estancias. El complejo residencial se completa en planta baja con dos salas de usos comunitarios.
La implantación y las proporciones de los bloques buscan el desahogo espacial de las zonas ajardinas y de ocio, el correcto soleamiento de las viviendas y su ventilación natural, así como las vistas hacia el paisaje circundante y el territorio, que suponen un valor añadido. Todas las esquinas quedan perfectamente aprovechadas por salones con terraza que ayudan a suavizar la volumetría.
La materialidad se resuelve con paños enfoscados y pintados en distintos tonos de blancos y grises, que junto al diseño de los huecos generan un código heterogéneo en la fachada. En este caso se opta por una composición de bandas verticales desfasadas por planta para enfatizar la expresividad y la identidad urbana de la propuesta.
El diseño de la urbanización genera un paseo peatonal entre ambos bloques desde el que se accede a los portales y al resto de áreas de esparcimiento.
Aprovechamiento máximo de la fachada
La tipología de vivienda nos permite aprovechar al máximo la fachada exterior, de forma que podemos volcar todas las estancias a la misma, incluida la cocina. Esta última adquiere una posición preponderante, asociada al salón y a la terraza, lo que permite convertir estos espacios en uno solo como variación al tipo estándar.
Vestíbulo que distribuye zona de día y zona de noche
El acceso a la vivienda se produce a través de un amplio vestíbulo, que desde una posición centrada permite el acceso a salón, cocina y dormitorios de forma independiente.
Espacios de almacenamiento
En las viviendas se cuida el diseño de los espacios de almacenamiento, disponiendo armarios en cada dormitorio. Además, los baños son amplios y permiten el almacenamiento de ropa y útiles de limpieza, así como el acomodo de estructura e instalaciones de ventilación.
Flexibilidad
Todos los tipos permiten modificaciones con obras sencillas que posibilitan, por ejemplo, obtener un salón cocina o prescindir de la compartimentación entre zona de día y noche.